Hacer una composta casera es una excelente forma de reciclar los residuos orgánicos de tu hogar y crear un abono natural para tus plantas. He aquí una forma, de entre tantas que existen, de hacerlo:
Materiales:
a) Residuos orgánicos. Como restos de frutas, verduras, cáscaras de huevo, residuos
de café, etc.
b) Materiales secos. Bien podrían ser hojas secas, ramas secas principalmente y pedazos de cartón.
c) Contenedor para compostaje. Podrías usar una cubeta grande o un contenedor de plástico.
Pasos a seguir:
1.- Elige un lugar. Selecciona un lugar en tu jardín o patio para hacer la composta, toma en cuenta que lo recomendable es que esté un poco retirado de tus ventanas o puertas debido a los aromas que va a despedir.
2.- Prepara el contenedor. Coloca una capa de materiales secos en el fondo del contenedor para ayudar con la ventilación y el drenaje.
3.- Añade los residuos orgánicos. Añade capas alternas de residuos orgánicos y materiales secos. Tritura los residuos grandes para acelerar el proceso de descomposición. Se recomienda mantenerlo cubierto con alguna tapa o plástico adecuado para este fin.
4.- Mantén la composta húmeda. Riega la composta regularmente para mantenerla húmeda pero no empapada, sino con buena humedad. La humedad es importante para que los microorganismos descompongan los materiales.
5.- Voltea la composta. Cada dos semanas, revuelve la composta con una pala para airearlo y acelerar el proceso de descomposición.
6.- Espera a que esté lista. La composta estará lista para usar cuando tenga un color oscuro y un olor a tierra fresca.
Una vez que esté lista tu composta, puedes utilizarlo como abono para tus plantas de jardín o macetas. Utilizando los productos que manejamos, te podría interesar el producto Guanovit o los microorganismo reproducidos de montaña llamados MMR-1.
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